La muerte materna en el estado Lara: La expresión de la emergencia humanitaria compleja en Venezuela

La tasa de mortalidad materna en el estado Lara fue de 100,1 por cada 100 mil nacidos vivos para el año 2018, de acuerdo con un estudio publicado por el Laboratorio de Desarrollo Humano (Ladeshu).

 

Tales números reflejan un incremento sostenido de este indicador en la entidad larense desde mediados de la década de los 90, alcanzando en el año 2018 un valor semejante al de los años sesenta del siglo XX.

 

Esto coloca a Lara a más de treinta puntos por encima de la reducción que se plantean los Objetivos de Desarrollo Sostenible sobre la mortalidad materna en el mundo para el año 2030.

 

El estudio también reveló que siete de cada 10 fallecimientos de madres que recién daban a luz ocurrieron en el Hospital Universitario Antonio María Pineda de Barquisimeto (HCUAMP).

 

La falta de personal calificado y de suministros médicos, así como las condiciones de los hospitales figuran entre las razones del aumento de la mortalidad materna evitable, que es una arista de las violaciones sistemáticas de los derechos humanos. Si a esto le sumamos la opacidad de las autoridades en la entidad sobre las cifras de mortalidad materna, el panorama para abordar este grave problema de salud pública se torna aún más complicado.

 

Es pertinente recordar que en 1992 la Organización Mundial de la Salud (OMS) definió la mortalidad materna como “la muerte de una mujer mientras está embarazada o dentro de los 42 días siguientes a la terminación del mismo, independientemente de la duración y el sitio del embarazo, debido a cualquier causa relacionada con o agravada por el embarazo mismo o su atención, mas no por causas accidentales”.