Hampa arrecia contra las universidades venezolanas durante la pandemia
En medio de la pandemia que obliga al confinamiento de la sociedad venezolana, la incertidumbre invade a la comunidad académica del país porque no sabe cómo encontrará a sus universidades luego del aislamiento, ya que el hampa ha embestido en contra de sus instalaciones, en su mayoría desprovistas de personal de vigilancia y sistemas de seguridad.
“El robo y el hurto se han acrecentado en las universidades, sobre todo en los recesos vacacionales o en períodos como el actual. La falta de un plan integral que proteja los bienes de las instituciones ha ocasionado el desvalijamiento de varios espacios de la mayoría de las universidades públicas en Venezuela. Gran parte de las denuncias que hemos visto durante el mes de marzo han sido sobre la afectación de la delincuencia en el derecho a la educación”, dijo el director del Observatorio de Universidades (OBU), Cárlos Meléndez.
En una consulta hecha a finales de 2019, 70% de los profesores de las universidades públicas en el estado Lara afirmaron que en sus lugares de trabajo ha habido robos y hurtos, mientras que 59% de los docentes de estas casas de estudio dijo sentirse inseguro dentro de ellas, de acuerdo con Meléndez.
ULA, una de las más golpeadas por el hampa
En una sola semana de cuarentena por la COVID 19, el hampa atacó tres espacios de la Universidad de Los Andes (ULA). Fue desmantelada la oficina de admisión estudiantil en Mérida, se llevaron equipos deportivos de la cancha de La Hechicera e invadieron y robaron ganado en la Estación Experimental Alberto Adriani. En esta última fue destrozada el área en el que se desarrollaban los proyectos de cacao y bambú por parte de unos particulares identificados como Emerson Guillén, Vicente Raúl Yerli Vergara, Carmelina Morales y Marcial Antonio Luna, denunció el profesor Domingo Alarcón, vice decano del núcleo Alberto Adriani de la ULA.
Contrariamente a lo que se espera, los organismos responsables de la seguridad han tenido una actitud extraña como la ocurrida en la Universidad Simón Bolívar. En lo que va de este mes, miembros de las Fuerzas de Acciones Especiales de la Policía Nacional Bolivariana han irrumpido en tres ocasiones en la sede de Sartenejas y han amenazado al personal de vigilancia. No se sabe qué buscan ni a quién buscan. Las autoridades han denunciado estos hechos ante el ministro de Educación Universitaria, César Trómpiz, pero no han tenido respuesta.
La Asociación Venezolana de Rectores Universitarios denunció que el pasado 17 de abril unos delincuentes volvieron a causar destrozos a la sede del Instituto Oceanográfico de la Universidad de Oriente (UDO). Los laboratorios se incendiaron en noviembre de 2019 y meses antes hurtaron cables y equipos de dicho instituto, así como de las escuelas de Idiomas Modernos, Matemáticas y del archivo general de la UDO. Solo en el edificio de Ciencias de la sede de Cumaná, el hampa se ha llevado 300 computadores en sus últimas incursiones, según el profesor de química, Jesús Lezama.
Marlon Díaz, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad de Carabobo (UC), denunció que unos objetos recuperados por la policía y que robaron de la Dirección Central de Asuntos Estudiantiles, son solo una parte de los sustraído días antes de esta oficina. Hasta ahora, no han tenido respuesta del resto de los equipos y materiales sustraídos por los delincuentes.
“La sostenibilidad de la universidad venezolana pende de un hilo. Mientras no se mire la seguridad de todo el sistema de educación superior como un todo, y se tenga un plan integral para protegerlas, seguiremos viendo la precarización de la academia. Exhortamos al Estado a proteger a las instituciones sin que ello signifique la violación de su autonomía, es su responsabilidad y deben cumplirla”, afirmó Meléndez.